Dentro de los tratamientos corporales, el peeling es el tratamiento previo más importante a la hora de tratar nuestra piel y mantenerla joven y tersa. Su objetivo consiste en eliminar células muertas, purificar y oxigenar la piel, preparándola para el tratamiento que se realiza a continuación. Con la hidratación devolvemos a la piel luminosidad y tersura, fortaleciéndola, calmándola y nutriéndola. Nos permite mantener la piel en perfectas condiciones.
La piel se renueva cada 28 días aproximadamente, pero la polución, el uso continuado de cremas, maquillajes y el sudor, hacen que este proceso se ralentice y los poros se obstruyan, de ahí la importancia de un un peeling corporal si queremos que la piel siga teniendo un aspecto radiante y sano por mucho tiempo.